Sin Arraigo
Tengo la impresión de que algunos hombres, no nacen en el lugar que les corresponde.
La casualidad los ha colocado en cierto medio; pero siempre sienten nostalgia por una patria que no conocen. Son extraños en su propio país y las frondosas sendas que conocieron en su infancia o las populosas calles en que jugaron de niños, solo han quedado como lugares de paso.
Tal vez ese desapego sea el que impulsa al hombre a buscar por todas partes, algo permanente.
Algunas veces encuentra un lugar al que misteriosamente se siente pertenecer. Ese es el hogar que buscaba, y se establecerá en un paraje que nunca había visto, entre hombres extraños hasta entonces para él, pero a los que parece haber conocido desde su nacimiento.
Aquí hallará por fin descanso.